Armando Pulido Rico es un obrero honesto de origen humilde, conocido por su carácter amable y su ética de trabajo. Harto de la difícil situación económica y social que enfrenta en su país, decide dar el gran salto y mudarse a Nueva York en busca de una vida mejor y la oportunidad de alcanzar el sueño americano.
Al llegar a la ciudad, Armando se enfrenta a una dura realidad que supera sus expectativas. Nueva York, con su ritmo frenético y su competencia despiadada, presenta desafíos inesperados. A pesar de su determinación y habilidad, encuentra que la búsqueda de trabajo en diversos campos, desde la construcción hasta empleos menos cualificados, es más difícil de lo previsto.